Lo Celso, el líder maduro que toma el testigo de Fekir e Isco
«Vendimos por 48 millones a un chaval que quería comerse el mundo y hemos fichado por cinco millones a un ídolo maduro», así celebran en el Betis el retorno de Giovani Lo Celso , felizmente confirmado como ídolo con sus dos goles ante el Getafe. En su primera conversación con Manuel Pellegrini tras su retorno, el chileno le insistía en su preocupación principal: el liderazgo. «No se preocupe, que yo me encargo», le respondió el argentino. Con 28 años, el Gio que se reencuentra en Heliópolis es diferente al que se marchó en cuanto a ascendencia, madurez y peso en el vestuario pero sobre el césped asume esos galones que le hicieron brillar con dieciséis tantos en 46 partidos. Entonces tenía 22 años y ganas de hacerse un hueco entre los grandes tras encontrarse con demasiadas dificultades en el PSG. El Tottenham apostó por él pero nunca volvió a tener una campaña igual. Sólo en el Betis disfrutó con plenitud. «El día que volví a Sevilla parecía que no había pasado el tiempo» , dijo. Y ahí están sus goles y el Villamarín echando humo con aplausos.Lo Celso volvió en el último día de mercado, como hizo en 2018 aquel 1 de septiembre. No vive en la misma casa que entonces, sino que ahora está en la que era de Guido Rodríguez. Su familia ha crecido, dado que con Magui , su mujer, fueron padres de Emilia a finales de diciembre de 2022. Lo Celso es tremendamente familiar. Un detalle lo evidencia. Cuando celebra sus goles abriendo la palma de la mano derecha y señalándola con el dedo índice de la izquierda, un gesto muy característico, lo hace en recuerdo de sus seres queridos. Juan , su padre; Sandra , su madre; sus hermanos, Luciana y Francesco; además de Magui, su mujer. Francesco , de 24 años, continúa su carrera como futbolista, y ahora milita en Instituto cedido por Rosario Central, el equipo del que son hinchas toda la familia. En su momento, en 2018, el Betis sondeó la opción de fichar a Francesco para convencer a Gio de que se quedara más tiempo pero no lo completó. Entonces tenía claro que si los verdiblancos no se clasificaban para Europa (acabaron décimos) cambiaba de aires. El Betis había pagado 22,5 millones por él, dado que en el acuerdo con el PSG podía comprarlo por 25 pero restándole el coste del año de cesión. Luego fue cedido por 16 millones y traspasado por 32 en enero, una cifra mayúscula. Regresó para suplir a Fekir y se encontró que también tenía que hacer de Isco. Y asume el reto. Ahora ha vuelto por cinco y con todas las facilidades, con una cláusula que ha elegido el club entre 60 y 100 millones , con contrato hasta 2028 y con su esfuerzo personal no sólo para esperar hasta el día final pensando sólo en el Betis sino presionando a Daniel Levy para que le abriera la puerta dirección su casa verdiblanca. Su sueldo está en el top del equipo junto a Isco y su única petición previa a llegar fue poder tomar el 20, que era uno de los pocos números que quedaban. Vitor Roque aceptó el 8. Lo Celso ya portó el 20 en la selección argentina pero ahora viste el 11 tras la renuncia de Di María, uno de sus ídolos, rosarino como él. En Heliópolis tuvo entonces el 21, con el que ha jugado en otras ocasiones, pero siempre se movió buscando el 18 , que ahora es propiedad de Fornals . Con la selección argentina tiene la oportunidad ahora de dar un paso adelante con la marcha del propio Di María y con las intermitencias de Messi. Se perdió Lo Celso el Mundial de 2022 por una lesión en esta secuencia exitosa de la albiceleste. Fue entonces cuando nació su hija. La madurez de saber afrontar ese momento difícil en lo deportivo al no estar en la foto de los campeones del mundo cuando era su sitio y la experiencia de ser padre por vez primera. Todo eso contribuye a su personalidad actual. Y con Scaloni tiene espacio para brillar pero sabe que eso ha de ganárselo en el Betis, donde tiene espacio para ser líder y brillar con el equipo a su alrededor. Una cuestión que todos destacan en el vestuario es que lo que pasa por sus botas mejora y que él potencia a los que tiene a su alrededor . Agradecidos están Abde, Fornals, Vitor Roque o Bellerín, que corren al espacio con sus pases filtrados. Y ojo a Bakambu cuando esté en plenitud. En su mapa de pases casi todos son hacia delante, como quiere Pellegrini. Vertical y decisivo.El mapa de pases de Lo Celso en el Betis – Getafe laligaEl que protagonizó ante el Getafe es el cuarto doblete oficial en la carrera de Lo Celso, que en el Betis sí consigue jugar más cerca del área que en otros conjuntos. Hizo dos goles también en un partido con el PSG ante el Mónaco en la 2017-18, en el Betis contra el Villarreal en el 2-1 de la 31ª jornada de la 2018-19 y en un 7-2 del Tottenham contra el Maccabi Haifa en la fase de grupos de la Europa League en la 2020-21. No marcaba el argentino en un encuentro desde marzo en un amistoso con Argentina ante El Salvador y desde diciembre de 2023 no lo había hecho en duelos con su equipo, en la Premier ante el City . Y no sólo goles, sino que de los 44 pases que intentó ante el Getafe 37 fueron a su destino, completó cuatro regates, tuvo dos ocasiones claras y dio dos pases clave, uno de ellos a Llorente que pudo hacer un golazo. Todo en 78 minutos. También en su liderazgo estuvo coger el balón y decirle al árbitro que tenía que pitar penalti en las manos de Milla tras el cabezazo de Vitor Roque. Lo tenía clarísimo. Tanto que cuando el colegiado fue al monitor, ya estaba Lo Celso en el punto de penalti esperando. Y lo iba a lanzar él. Y marcó.De carácter reservado fuera del campo, Lo Celso tiene buena relación con todos pero empezó esta etapa con mayor relación con William Carvalho y Bartra , por ser los únicos que quedaban de su estancia anterior, y con Chimy Ávila por ser compatriota. Pellegrini y Cousillas le entienden bien. Suele ser un jugador frío y por eso sorprenden sus besos al escudo después del primer gol ante el Getafe. El equipo sabe que es un líder y le sigue. El argentino también besa con frecuencia un rosario que tiene en el vestuario antes y después de los partidos. Es respetuoso con todos pero también le gusta ser discreto. Juega con manga larga a pesar de que sea verano y tiene múltiples tics sobre el césped, donde cada dos por tres está tirándose de las calzonas y la camiseta.Ahora todos en el Betis se frotan las manos con su retorno. Encaja a la perfección en las ausencias de Fekir e Isco . Las cábalas llegarán cuando Pellegrini pueda disfrutar también del malagueño y les haga coincidir en el campo. Benito problema. Al contrario, ilusión verdiblanca. El propio malagueño publicaba ayer en redes sociales este texto «ufff, mi equipo», junto a una foto del grupo celebrando uno de los tantos del argentino. Desde un palco del Villamarín lo vio todo. Espera su momento pero Lo Celso ya cubre bien su ausencia. Y cuando regrese será en el momento clave de la temporada.