‘Tardes de soledad’, el plano corto del alma de la lidia
El Festival de San Sebastián reconoció los valores cinematográficos de ‘Tardes de soledad’, una película que mira como nunca se había hecho el encuentro artístico, bélico y espiritual entre el hombre y el toro bravo, y que recoge con absoluta solemnidad y plasticidad la ceremonia violenta y elegante de dos soledades que combaten por la vida mientras dibujan una coreografía de trapo, sudor, furia y sangre en medio de una plaza, un espectáculo y un público al que nunca mira la cámara de Albert Serra , ensimismada en el misterio, las pinceladas, el dolor, el riesgo, el viento de la guadaña en busca de su invitado.Noticia Relacionada estandar No Albert Serra: «Roca Rey tenía la razón moral, yo la razón estética» Sergi Doria El director de ‘Tardes de soledad’, documental sobre el toreo que estrena el próximo 7 de marzo, habla del cine en primera filaAhora, el Premio Nacional de Tauromaquia reconoce también el valor taurino de la obra, el lugar, la distancia y el arrojo de la cámara de Albert Serra para pintar su lienzo y atrapar en él los misterios de la lidia, su liturgia e intriga, su lenguaje y los diferentes ‘diálogos’ que se establecen entre el hombre y el toro y entre el maestro y su cuadrilla. Unos textos enriquecidos dentro de una película exquisitamente silenciosa, para que se dejen oír los gestos, las gotas, de miedo, de sudor, de sangre, los ánimos y desánimos. Sea una obra maestra del cine o lo sea de la tauromaquia, ‘Tardes de soledad’, tan taurina, tan antitaurina, es mucho más que una impresión, una opinión o una polémica.