La presión policial enfría la amenaza yihadista en Andalucía
La presión policial contra el yihadismo está dando sus frutos en Andalucía, sobre todo los golpes a la propaganda difundida por internet. Cuando se cumplieron este domingo dos años del atentado de Algeciras las operaciones contra este tipo de terrorismo internacional han frenado, después del aumento tras la guerra de Gaza durante el 2024. Desde el 2 de julio solo ha habido una operación en Andalucía por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, como recogen las estadísticas del Ministerio de Interior y del Observatorio del Terrorismo en España contra el yihadismo. Fue un punto de inflexión contra el adoctrinamiento la gran operación contra los portales de propaganda el 11 de junio, desde entonces la actividad decayó y el ritmo de operaciones se fue enfriando en la región.Código Desktop Imagen para móvil, amp y app Código móvil Código AMP Código APP Los servicios de Información e Inteligencia siguen con su labor callada, vigilando, detectando y neutralizando amenazas, como la del tunecino detenido y expulsado en la frontera de Ceuta hace unos días. Un retornado de Siria, que fue trató de cruzar a España como inmigrante ilegal. Se quedó a 45 minutos de barco de una Andalucía que ha visto como la amenaza latente del yihadismo se ha tomado un respiro, pese a la detención este viernes en Málaga del sujeto que le vendió un subfusil a un terrorista en Bélgica para matar a dos suecos. Un proveedor, pero no un muyaidín. La primera operación del año pasado fue el 21 de enero en Montellano (Sevilla). Allí la Policía Nacional detuvo a un menor de 17 años de edad y nacionalidad siria que, presuntamente, estaría tramando la comisión de un atentado terrorista en su instituto. En el registro de la vivienda de este joven se hallaron sustancias explosivas ya listas para ser activadas, así como percusores. Podía montar una bomba en cualquier momento. Responde a los nuevos perfiles jóvenes y adoctrinados por redes sociales. «La radicalización yihadista en España se caracteriza por la juventud» , afirmó la Fiscalía de la Audiencia Nacional en su última memoria. El 28 de marzo, la Guardia Civil realizó una operación en La Zubia (Granada), que acabó con la detención de un policía local de Granada supuestamente convertido al Islam. Se creyó que se había adentrado en un proceso de autoadoctrinamiento, pero no era un yihadista. El auto de archivo del Juzgado Central de Instrucción 1 de la Audiencia Nacional cerró la causa. Los informes de la Guardia Civil apuntaban a que «utilizaba activamente redes sociales para actividades personales, pero no se encontraban evidencias de participación en acciones delictivas» o en la «distribución» o «consumo» de «contenido radical».Noticias relacionadas estandar Si El cibercalifato: la gran amenaza yihadista para Andalucía J. J. Madueño estandar Si yihadismo La Audiencia Nacional sitúa el atentado de Algeciras en un mapa de terror contra los cristianos en Europa J. J. MadueñoLa principal operación del año en Andalucía fue el 11 de junio. Los Servicios de Información de la Guardia Civil realizaron una macrooperación en Salt (Girona), Antás (Almería), Algeciras y Tenerife, que se saldó con la detención de al menos nueve personas (dos de ellas en Algeciras y una en Almería). La investigación fue dispositivo internacional en el que se consiguió intervenir numerosos servidores de propaganda de Daesh. Eran plataformas de contenidos, como el ‘Netflix’ de la yihad . Un lugar donde se colgaban todo tipo de contenidos, tanto oficiales como no verificados por Estado Islámico. De ahí, una legión en todo el mundo de Munasires, guerreros de la palabra, difundían de forma convulsiva para adoctrinar con un impacto potencial en millones de personas. Podían conseguir radicalizaciones exprés como la que tuvo Yassine Kanjaa, el yihadista de Algeciras, que mató a un sacristán e hirió a un párroco el 25 de enero de 2023 en un ataque a varias iglesias de la ciudad. La investigación achaca a todos los detenidos ser parte de un entramado internacional con ramificaciones en otros países de Europa , que publicaba y difundía contenido propagandístico de Daesh. Algo sobre lo que alerta Europol, que señala en su último informe que los perfiles más jóvenes crean grandes redes internacional de propaganda. «Se ha constatado su especial capacitación para planificar y ejecutar ataques de manera autodidacta en comunidades virtuales», aseguraba la agencia policial europea a primeros de año. El 24 de junio la Guardia Civil realizó una operación en Málaga en la que fue detenido un hombre de 45 años por los presuntos delitos de adoctrinamiento y enaltecimiento del terrorismo. A través de redes sociales como Tik-Tok y mensajería instantánea encriptada, el detenido adoctrinaba en favor de las tesis de la organización terrorista Estado Islámico a sus miles de seguidores. Lo hacía mediante la creación de numerosas cuentas de redes sociales, administraba directos ‘lives’ y canales, cuyo objetivo principal era la difusión de contenidos yihadistas auto editados. Los mensajes eran procedentes de la propaganda oficial de Daesh . El detenido contaba con experiencia en la estrategia mediática descentralizada de la organización, que ponía de manifiesto en la maquetación de contenidos con más de 20 softwares de edición especializada.Noticias relacionadas reportaje Si TERRORISMO La ruta andaluza de la yihad a Europa: el último viaje del retornado más peligroso de Siria J. J. Madueño estandar No Atentado en Algeciras El móvil de Yassine, la clave de cómo se radicalizó el ‘lobo solitario’ de Algeciras J.J. MadueñoPor un lado, propagaba viralmente en la red de archivos de reconocidas figuras ideológicas y dogmáticas, como Abu Ali al-Anbari , quien desempeñó un rol importante en la estructura militar de la organización, tras servir como emir del Departamento de Soldados y nombrado adjunto del líder Abu Bakr al- Baghdadi . Por el otro, promocionaba contenidos incitadores a la violencia, como los atentados suicidas del Daesh en zonas de conflicto o los ataques terroristas cometidos en el Crocus City Hall de Moscú , que dejó más de 140 fallecidos y centenares de heridos. Se le incautó un billete de avión para irse a Nador (Marruecos). «Utilizan evolucionabas técnicas de captación para manipular a los menores , distorsionando su visión de la realidad y ofreciéndoles un falso sentido de identidad y de un propósito», señalaba el informe de la Fiscalía, que añadía que «a través de una narrativa simplista y atractiva, les prometen un mundo idealizado donde podrán encontrar la justicia y la satisfacción personal que anhelan». Es lo que atrae cada vez a más adeptos. El mismo 24 de junio una joven fue detenida por agentes de la Guardia Civil en Agrón (Granada) por enaltecimiento del terrorismo y difusión de propaganda. La mujer quedó en libertad a la espera de ser analizado el material informático que le fue incautado. El 2 julio otro golpe a los ‘cachorros’ de la yihad. La Guardia Civil realizó una macrooperación en Melilla, Madrid y Málaga, que se salda con la detención de ocho personas, cinco de los cuales ya se encuentran en prisión, de un grupo juvenil de radicalización . Desde Melilla se compartía y difundía contenido propagandístico de Daesh a través de diversos canales de mensajería para adoctrinamiento. Noticias relacionadas estandar No Terrorismo La Policía detiene a un posible colaborador del terrorista que mató a dos suecos en Bélgica hace diez días J.J. Madueño y Pablo Muñoz estandar No Detenido en Málaga el armero del yihadista que mató a dos personas en Bélgica en un partido previo a la Eurocopa MARÍA ALONSO Y J. J. MADUEÑOA medida que crecía su actividad, el grupo fue incorporando a nuevos miembros afines, entre los que se encuentran los otros dos detenidos en Madrid y Málaga. Todos ellos destacaban por su extremismo. El grupo principal daba asesoramiento en veredictos de líderes yihadistas . Este grupo llegó a interesarse en varias conversaciones por la fabricación de explosivos para poder cometer atentados en España. La última operación en Andalucía fue el 26 noviembre en Sevilla. Dos personas fueron detenidas por la Guardia Civil. Los arrestados tenían edades comprendidas entre 35 y 46 años. Se encontraban en un avanzado proceso de radicalización, tras consumir abundante propaganda yihadista relacionada con Estado Islámico. Esa misma propaganda la compartían en redes sociales. El juez decretó el ingreso en prisión de ambos. Desde entonces no ha habido más arrestos. El año cerró con siete intervenciones y diez detenidos , la mayoría por compartir propaganda para expandir la yihad.