Los andaluces gastan más en congelados, charcutería o cervezas y menos en pescado y frutas que el resto de españoles

Los andaluces gastan más en congelados, charcutería o cervezas que la media en España. Por el contrario, el presupuesto que destinan a frescos es inferior porque adquieren menos productos como carne, pescado o frutas .Por un lado, el mayor gasto en charcutería se puede corresponder a razones culturales o de tradición , según explica a ABC el responsable del Área Comercial de Circana, Antonio Khalaf, a la vez que achaca el menor consumo de frescos a que Andalucía es una de las comunidades con menor poder adquisitivo y estos artículos suelen tener un coste más elevado que sus sustitutivos en formato congelado.En concreto, el desembolso en congelados en Andalucía supera en 0,8% a la media de España así como el de charcutería (0,5pp) o el de cervezas (0,4pp). En el opuesto, el dispendio en carne se sitúa un punto por debajo del dato nacional, el de frutas en 0,7 puntos porcentuales y el de pescado en 0,5 puntos porcentuales. «Es evidente que el factor precio puede influir en la compra de productos frescos o, por el contrario, optar por congelados » , asegura también la presidenta de la Confederación Andaluza de Empresarios de Alimentación y Perfumería (CAEA), Virginia González. En cualquier caso, matiza que la diferencia entre el consumo de estos productos en España y Andalucía «no son relevantes desde el punto de vista cuantitativo a nivel de sector». Según datos de la patronal de los supermercados, el primer factor que se toma en cuenta para llenar la cesta de la compra es el precio, seguido por la calidad, conveniencia, surtido, proximidad, la marca de fabricante o de distribuidor, las promociones, la sostenibilidad y el autocuidado, entre otros.La cesta de la compra sube un 23% en tres añosLa cesta de la compra se ha encarecido un 23,5% en los últimos tres años en Andalucía y un 22,3% en España . Como consecuencia de esta tendencia inflacionista, que ha sido superior al incremento de los salarios de los trabajadores , se ha desencadenado un cambio en el comportamiento de los consumidores en el supermercado. Por un lado, se realizan más compras selectivas. En concreto, el 46% de los consumidores deja de comprar productos que antes sí adquiría para controlar mejor los gastos. Además, el 60% reconoce que realiza compras más racionales con mayor planificación. Otra consecuencia de la inflación es una mayor consideración del precio y de los productos en promoción. Las personas acumulan más productos en casa cuando pueden conseguirlos en oferta . «Casi una de cada tres cervezas que compramos tienen descuento», apunta Khalaf.La marca de distribuidor creceAnte el incremento de precios, la marca de distribuidor (más conocida como marca blanca) ha logrado salir fortalecida. De hecho, España es el país europeo en el que más se gasta en ella y casi el 50% de la cuota en valor de los supermercados se corresponden con este tipo de productos. El dato de España es del 48,5% frente a la media del 39,2% en Europa. Una distancia que se agranda si se compara, por ejemplo, con el 30% de Italia o el 43% de Alemania. En el caso de Andalucía, el gasto en estos productos es aún mayor que en España . Por ejemplo, en los artículos de droguería e higiene, los andaluces prefieren los productos de marca de distribuidor y estos acaparan el 72% de la cuota de venta en valor, superando en ocho puntos porcentuales al dato nacional. En el caso de la perfumería y higiene, la cuota de venta en valor en Andalucía supera en más de nueve puntos a la media de España . Por su parte, en la alimentación en general la cifra de la marca blanca en la región es siete puntos mayor y en las bebidas sobrepasa al dato nacional en más de cinco puntos.La inflación preocupa a la distribuciónAunque los precios han dejado de crecer al ritmo vertiginoso de los últimos años, los efectos de la inflación se mantienen aún como una de las principales amenazas para el consumidor y también para el sector de la distribución . Así se desprende del X Estudio Económico del Sector Agroalimentario de Andalucía, presentado ayer en el XII Foro de la Empresa Agroalimentaria y de la distribución comercial Landaluz-CAEA. En concreto, el socio responsable de Consumo y Distribución de KPMG, Enrique Porta, y el senior manager de auditoría de esta entidad en Andalucía, Juan Luis Cañete, apuntaron a que la inflación también preocupa a la distribución porque «pierden rentabilidad» por el incremento de costes y por la dificultad para repercutirlos. Además, pusieron el acento en que se contrae el consumo al caer el poder adquisitivo.En concreto, casi la mitad de las empresas encuestadas por KPMG apuntaron a que la sequía y otros eventos climáticos adversos suponen también una amenaza notable para su negocio. Por otro lado, el 40% de los cuestionados se mostró preocupado por la erosión del poder adquisitivo y el 36% por el auge de la marca del distribuidor. El sector prevé que en los próximos meses el entorno inflacionario sea más estable. En el caso de los precios al consumidor, cabe destacar que ningún directivo espera para los próximos meses un incremento elevado, mientras que un 43% estima que la inflación será moderada y un 50% proyecta un escenario de estabilización, según el citado informe.La mitad de las empresas agroalimentarias andaluzas encuestadas en el referido estudio están consiguiendo mantener sus márgenes en 2024 , aunque «en algunos casos esta evolución implica consolidar la pérdida de rentabilidad que se produjo en 2023» (año en el que el 56% de las compañías afirmaban que sus márgenes disminuyeron). No obstante, el impacto de la inflación en el sector aún no se ha mitigado por completo, como muestra el hecho de que seis de cada diez empresas (62%) considera necesario continuar realizando ajustes en los próximos meses.

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *