El intrincado sudoku para cuadrar el traslado de menores migrantes
Cada vez que el presidente canario, Fernando Clavijo, se reúne con algún miembro del Gobierno, aparece con alguna tabla debajo del brazo. Tras más de un año y medio de negociación, podría decirse que Clavijo ha inventado ya casi todo para lograr sacar de Canarias a miles de menores que emigraron solos y que permanecen hacinados en centros de acogida de las islas: pacto con el Gobierno, luego con el PP, lanzamiento de órdago para delegar competencias en el Estado, negociación con todos los grupos políticos, pedido de auxilio a la UE, viajes a África, récord de llegadas, fracaso parlamentario para cambiar la ley de la extranjería, acercamiento al PNV y vuelta a empezar… Pero más allá del encaje político y mediático, esas tablas en las que se simula cómo redistribuir a miles de menores por toda España son la clave para que la fórmula funcione. “Tenemos que seguir haciendo números”, advierten fuentes de la negociación.