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Con el permiso del besapiés del Señor de Pasión, el primero del año, e l último fin de semana de enero marca el inicio de esos días en los que se celebran numerosos besamanos en las distintas hermandades, una tradición que continuará hasta la llegada de la Semana Santa. Ni la lluvia y la media maratón ha sido un impedimento para realizar las tradicionales visitas de los cofrades.Uno de los rincones destacados para visitar ha sido la iglesia de Los Terceros, con el besapiés del Señor de la Humildad y Paciencia, una talla de gran valor artístico e histórico, cargada de una rica tradición a sus espaldas. Esta ha estado en el presbiterio, mientras la Virgen del Subterráneo se encontraba en lo más alto de un altar que, hace unos días, fue utilizado para los cultos del titular de la Cena.Hubo cabida para dos funciones: en la sede de la Mortaja y en la parroquia de San Sebastián, al celebrarse la festividad de la Paz. La primera, titular de la sede de la corporación del Viernes Santo, ofrece una gran oportunidad para acercarse a una imagen que, durante el resto del año, se encuentra en lo más alto del retablo mayor. Mientras tanto, en el Porvenir, la dolorosa de la Paz fue colocada en un altar; no estuvo en besamanos, ya que la hermandad solicitó una dispensa para hacerlo durante el segundo Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular.En San Bernardo no faltó la cita anual con el besamanos de la Virgen del Refugio, quien lució sus mejores galas, con el manto de Esperanza Elena Caro, bajo el diseño de Juan Manuel Rodríguez Ojeda, y la saya conocida como la de ‘Pepete’. Un día para reencontrarse entre hermanos, para revivir, aunque sea por un momento, a los antiguos vecinos, y para atestiguar una devoción inmensa en la ciudad, todo en un ambiente genuinamente de barrio.Como de barrio es también el ambiente de San Roque . El Señor de las Penas estuvo en besapiés, colocado en las andas para ser llevado durante la noche a su altar, después de celebrarse el Vía Crucis por el interior de la parroquia. Otro día festivo en esta hermandad en torno a Cristo.