Nobel de Química 2024 para la inteligencia artificial de Google que predice la estructura de las proteínas
Este el año de la inteligencia artificial. Si el martes el Nobel de Física sorprendía a muchos al caer en manos de John Hopfield y Geoffrey Hinton por su trabajo en las redes neuronales artificiales, que han permitido la creación de ChatGPT, este miércoles el Nobel de Química se lo ha llevado otra IA, aunque esta vez sí sonaba en las quinielas. La Real Academia de Ciencias de Suecia ha reconocido a David Baker, de la Universidad de Washington, por lograr “la hazaña casi imposible” de construir tipos de proteínas completamente nuevos, y a Demis Hassabis, CEO y cofundador de Google DeepMind y a su director, John Jumper, por el desarrollo de Alphafold, un modelo de inteligencia artificial capaz de predecir las estructuras complejas de las proteínas. No solo resolvieron un problema científico de hace 50 años sino que ambos descubrimientos “abren enormes posibilidades”, en palabras de Heiner Linke, presidente del Comité Nobel de Química.Las proteínas están formadas por 20 aminoácidos diferentes, que pueden describirse como los componentes básicos de la vida. En 2003, David Baker logró utilizar estos componentes para diseñar una proteína nueva que no se parecía a ninguna otra. Desde entonces, su grupo de investigación ha producido una proteína tras otra, incluidas proteínas que pueden utilizarse como fármacos, vacunas, nanomateriales y sensores diminutos.El segundo descubrimiento se refiere a la predicción de la estructura de las proteínas. En las proteínas, los aminoácidos están unidos entre sí en largas cadenas que se pliegan formando una estructura tridimensional, que es decisiva para la función de la proteína. Desde los años 70, los investigadores habían intentado predecir su estructura a partir de las secuencias de aminoácidos, pero esto era notoriamente difícil. Sin embargo, hace cuatro años se produjo un avance sorprendente.En 2020, Demis Hassabis y John Jumper presentaron un modelo de inteligencia artificial llamado AlphaFold2. Con su ayuda, han podido predecir la estructura de prácticamente todas las 200 millones de proteínas que los investigadores han identificado. Desde su gran avance, AlphaFold2 ha sido utilizado por más de dos millones de personas de 190 países. Entre una gran cantidad de aplicaciones científicas, los investigadores ahora pueden comprender mejor la resistencia a los antibióticos y crear imágenes de enzimas que pueden descomponer el plástico.La vida no podría existir sin las proteínas. El hecho de que ahora podamos predecir las estructuras proteicas y diseñar nuestras propias proteínas es,s según la academia sueca, un gran beneficio para la humanidad.En conexión telefónica, Baker ha explicado que estaba durmiendo cuando el teléfono ha sonado. “Mientras alguien me daba la noticia al otro lado, mi esposa se ha puesto a gritar y no podía escuchar bien”, ha contado. Porque, aunque había escuchado su nombre entre los posibles candidatos de los últimos años, el premio para él ha sido una sorpresa. “Estoy muy emocionado. Solo quiero agradecerle a mi familia y a toda la gente con la que he trabajado todos estos años y han hecho posible que lleguemos hasta aquí”. Al ser preguntado acerca de las implicaciones de la inteligencia artificial en el futuro, tal y como muestra no solo AlphaFold, sino también las redes neuronales y el aprendizaje automático que el martes reconoció Nobel de Física, Baker ha afirmado que “son tremendas”. “Mis colegas y yo llevábamos trabajando años en el diseño de proteínas, pero no fue hasta el descubrimiento de Hassabis y Jumper con la inteligencia artificial cuando la potencia y la precisión de la herramienta se incrementó de una forma increíble. Me emociona mucho pensar en todas las posibilidades que ofrece este sistema para hacer un mundo mejor, con aplicaciones para potenciar la medicina o la tecnología”, ha señalado. El Nobel de Química está dotado con 10 millones de coronas suecas, esto es, 900.000 euros.A lo largo de su historia, se han entregado 115 Nobel de Química a 194 personas. De ellas, ocho son mujeres, entre las que se encuentra Marie Curie. El premiado de más edad tiene 97 años: se trata de John B. Goodenough, que fue galardonado en 2019, mientras que el más joven, 35, Frédéric Joliot, en 1935.En 2023, el reconocimiento fue para Moungi G. Bawendi, Louis E. Brus y Aleksey Yekimov, que fueron galardonados por el descubrimiento y desarrollo de los puntos cuánticos.Desde este semana y hasta el próximo lunes se están dando a conocer los Premios Nobel. Por el momento, además de este de Química, se han anunciado el de Medicina y el de Física. El de Medicina, anunciado el lunes, fue otorgado a Victor Ambros y Gary Ruvkun por un descubrimiento fundamental sobre el funcionamiento de las células: los microARN, pequeñas moléculas de ARN que juegan un papel clave en la regulación de los genes. El Nobel de Física fue a parar el martes al estadounidense John J. Hopfield (Chicago, 1933) y al británico Geoffrey E. Hinton (Londres, 1947), conocidos como los ‘padrinos’ de la inteligencia artificial, por su trabajo en redes neuronales artificiales, que permiten a las máquinas aprender. Estos hallazgos pusieron las bases a la creación de los grandes modelos de lenguaje actuales, como ChatGPT y otros chatbots que han cambiado el mundo. Pero Hinton dejó Silicon Valley el pasado año para advertir de los peligros de la tecnología que ayudó a crear. Este jueves será el turno del de Literatura.[EN AMPLIACIÓN]